sábado, 25 de abril de 2009

DE BESTIA A BELLA

LUEGO DE HABLAR SOBRE EL TRINFO DE SUSAN BOYLE Y DEL ANÁLISIS SOBRE LA BELLEZA INTERIOR O LA DEL TALENTO DE ELLA, LEO QUE ESTÁ MODIFICANDO SU IMAGEN. SU ESTETICA. MUCHOS, PARECE SER, CRITICAN ESTA DECISIÓN.

VEAMOS.

¿NO ES A TRAVÉS DE LA LITERATURA QUE TODA BESTIA SE TRANSFORMA GRACIAS A LA MAGIA (NO AL TALENTO) EN BELLA? ¿NO ES CENICIENTA UNA POBRE DESGRACIADA Y SE CONVIERTE EN LA PRINCESA DE LOS SUEÑOS. BELLA? ¿NO ES LA BESTIA DE LA BELLA Y LA BESTIA UN PRINCI´PE SEDUCTOR. BELLO? ¿NO ES BETTY LA FEA BELLA CUANDO LOGRA SU TRANSFORMACIÓN?

A TODOS, O A LA MAYORÍA ESTO LE PARECE LÓGICO. PARA SER BELLA HAY QUE DEJAR DE SER FEA.

HAY QUE OPERARSE, CORTARSE EL PELO, TOMAR SOL, ADELGAZAR Y SER... BELLA.

¿DE QUE SE QUEJAN ENTONCES?

YO NO ME QUEJO.

ME PREGUNTO.

LA BELLEZA DE ESTA MUJER DEPENDIÓ DE LA CONTRAPOSICIÓN DE SU NO BELLEZA CON SU TALENTO MARAVILLOSO.

SI EN LUGAR DE ESTA MUJER HUBIESE SALIDO UNA MUJER BELLA O NORMAL PARA LOS DEMÁS, NO HUBIESE HABIDO RISAS Y SU TALENTO NO HUBIESE SIDO IGUAL DE ALABADO. CREO ES ASÍ.

POR LO TANTO NOS CONMUEVE ,COMO HE DICHO, QUE LA GENTE TRANSFORME LA RISA EN DELIRIO ADMIRATIVO.

QUE SE CONMUEVAN DE LA CENICIENTA. DE BETTY LA FEA.

AHORA, PREGUNTO, ¿SI ESTA MUJER DEJA DE SER "FEA", LA VERAN IGUAL DE BELLA?

PORQUE SIENTO QUE ES NO SE SI AL TRATAR DE SER "BELLA" Y PRETENDER DEJAR DE SER "FEA" SE ACRECENTARÁ SU BELLEZA.

BARBRA STARISNAD NUNCA PERMITIÓ QUE LE OPERASEN SU INMENSA NARIZ. TRIUNFARÍA CON ELLA. O NO TRIUNFARÍA. TRINFÓ Y AL HACER SIGUIÓ AUN MAS OBSTINADA CON ELLA.

EDITH PIAF (POR FAVOR QUIEN NO LA HAYA ESCUCHADO ENTRE EN YOU TUBE Y VEANLA. ESCUCHENLA, ERA BAJITA, FEA, DESGARBADA. Y ERA MAS QUE BELLA. AL SALIR AL ESCENARIO CON SU POLLERA O VESTIDO NEGRO SIMPLE MEDÍA TRES METROS Y CONVOCABA MULTITUDES QUE BRAMABAN. EL GORRIÓN DE PARIS LA LLAMABAN.

TEMO QUE SUSAN BOYLE DEJE DE SER TAN BELLA POR QUERER SERLO. QUE AL INTENTARLO PIERDA SU MAGIA. PIERDA SU BELLEZA Y SEA UNA MAS QUE CANTA MARAVILLOSAMENTE Y QUE A PESAR DEL INTENTO NO SERÁ TAN BELLA. NO HAY MAGIA COMO EN LOS CUENTOS.

LAS FEAS EN LA REALIDAD SOLO SE TORNAN MENOS FEAS. NO MAS BELLAS.

4 comentarios:

Maria dijo...

CON RESPECTO A SUSAN ME PARECE ENCANTADORA Y CREO LO ES TB POR DENTRO, SI ES POR DENTRO TAN BELLA COMO CUANDO CANTA..POR LO MENOS ESO ES LO QUE TRANSMITE AL MOMENTO DE HACERLO, QUE VOZ!!
NOS DEJO A MAS DE UNO SIN HABLA, Y POR SU DON, CREO QUE AL ESCUCHARLA NOS OLVIDAMOS DE SU ESTETICA Y PODEMOS APRECIAR QUE ES BELLA, MUY BELLA!!
A VECES HASTA LOS MAS BELLOS NO TRANSMITEN SEMEJANTE EMOCION COMO LO HACE ELLA, CREO NO TIENE NADA QUE VER, PARA MI BRILLA EN EL ESCENARIO!! Y EN SU CASO LA BELLEZA PASA DESAPERCIBIDA.
CARIÑOS PEPE!!

Manuela Perin dijo...

QUERIDO PEPE:

SIGO ESCUCHANDO A SUSAN SIN CESAR. LOS MISERABLES ES UN MUSICAL QUE ME APASIONA Y PARTICULARMENTE ESE TEMA.
BUSCANDO POR YOUTUBE, ENCONTRE OTRO TEMA CANTADO POR ELLA, EL TEMA ES "CRY ME A RIVER"
UNA MARAVILLA!

TE DEJO ACA EL LINK, POR SI TE DA GANAS DE ESCUCHARLO MAÑANA, TRANQUILO, EN PILAR CON TUS MASCOTAS Y TUS PLANTAS.

http://www.youtube.com/watch?v=CqH6pz01Y1c&annotation_id=annotation_152352&feature=iv

MUCHOS BESOS, TE QUIERO!
MANU

Manuela Perin dijo...

dejo otro bastante sorprendente para compartir!

http://www.youtube.com/watch?v=D4mB94ejivU&annotation_id=annotation_28496&feature=iv

mas saludos y besos!

Anónimo dijo...

Estas reflexiones me recuerdan una frase genial de Umberto Eco:
“La fealdad es siempre un error de sintaxis y por eso es infinita, porque las
maneras de construir una frase de forma correcta son escasas, pero las de
hacerlo mal son infinitas,”
Es interesante pensar que el concepto de belleza puede llevar aparejado el de
mediocridad. La belleza implica un canon, y cómo tal un recetario de normas, formas
y condiciones que cualquiera sin taras irresolubles es capaz de cumplir. De ahí y
a continuación la producción en masa y la total nivelación.
No es más cruel el cirujano que estira las mismas pieles, rasga las mismas
patas de gallo y esculpe las mismas narices que el pintor que calca el mismo
rostro de virgen con el pálido fulgor que ya no le produce raptos de
trascendencia a nadie, o el que reescribe el mismo argumento con la excusa de
que es eterno (sólo hay una historia de amor y es la de Romeo y Julieta; si la
versión que recordamos es la Shakespeare es porque él hizo más que seguir la
receta).
Si la belleza es norma la fealdad es excepción y por eso nos interesa, en cuanto
es excepcional. No hace falta decir que la fealdad no es un valor estético en sí y
tan mediocre como la belleza nivelada. Sólo lo extremadamente feo es
interesante. Lo que resulta chocante contra nuestros estereotipos de belleza a veces
resulta fascinante de ver. Como Susan Boyle. Es que la fealdad permite una experimentación más libre que la convencional belleza. Ahora es cierta también que la fealdad debe ser acompañada de otros requisitos que la extremen, que la potencien, solo así resulta interesante, es decir, no pasar desapercibida. La fealdad debe tener algo lo suficientemente polémico con el canon de belleza para tener entidad propia.
La belleza en cambio como es convención, necesita de algo más para escapar de la rutina. Afortunadamente y muy a pesar de la publicidad y de los estereotipos que se nos quieren imponer, la mayoría de los mortales nunca nos enamoraríamos de la belleza pura (si es que la hubiera), porque afortunadamente necesitamos de las imperfecciones, de los detalles, de las diferencias.
Hay que decir que en arte contemporáneo afortunadamente la belleza no es un canon a seguir. En la actualidad la idea de belleza parece haber perdido el venerable, indiscutido arraigo del que gozó durante la mayor parte de la historia. Las vanguardias artísticas del siglo XX pusieron en crisis su vigencia, su carácter homogéneo y reconocible, incluso dejaron de aspirar a ella. La marginaron y la ridiculizaron. Pocas nociones se hallan tan asociadas a nuestra idea convencional del arte como la de belleza; pocas, sin embargo, se encuentran tan a menudo alejadas de nuestra experiencia habitual del arte contemporáneo. Solo basta ir a una exposición de pintura en cualquier museo de arte moderno, o en escuchar alguna pieza sinfónica de un músico del siglo XX.
Sin embargo esto no fue siempre así desde los griegos, y durante más de dos milenios, la belleza fue la característica principal de la obra de arte o de lo que se entendiera por tal. Si en Platón el concepto no tenía, primariamente al menos, una carga estética, en la Poética aristotélica ya encontramos una definición apropiada de belleza artística: orden y magnitud eran los requisitos esenciales que debía cumplimentar una obra lograda. En su Metafísica, Aristóteles añadió otro término, el de armonía. Ese legado griego, de ninguna manera originado en Aristóteles, pero potenciado por él, sería una fórmula perdurable en el pensamiento occidental.
¿Ahora que paso con ese canon que gobernó en el arte cientos de año?
Paso que apareció un verdadero terremoto, a comienzo del siglo XX, con el emblemático “Mingitorio” (si pueden véanlo en Internet y verán de que hablo) de Duchamp y las vanguardias plásticas y literarias que allanaron el camino para la introducción de obras difícilmente aceptables siquiera como arte (es decir, sin considerar su valor estético, bueno o malo, sino su mero estatuto) en los 25 siglos que nos preceden.
Por eso lo de Susan es tan importante y llama la atención de especialistas y neófitos. Porque tal vez lo que esta en marcha es una critica a los convencionalismos y estereotipos, no en el arte que como hable ya cayeron hace tiempo, sino a los del marquetin, la publicidad y el gusto burgués. Tal vez Susan sea el “Mingitorio” de estos tiempos. Un saludo MARCOS.